domingo, 31 de enero de 2021

El fantasma de la ópera



Quizás se piense que El fantasma de la ópera es la novela más conocida de Gaston Leroux, y es posible que se tenga razón, pero la que escribió tres años antes en 1907 El misterio de la habitación amarilla, también es conocida en el mundo entero.

El oficio de Gaston, reportero, intuyó en sus novelas. Tanto en el misterio de la habitación amarilla como en El fantasma de la ópera, no se puede negar que un reportero la escribe y la narra.

Así como en El misterio de la habitación amarilla un reportero (al estilo de Tintín) es el que lleva la acción y la narración, en El fantasma de la ópera la narración está soportada sobre los relatos de los hechos que tienen los personajes, y el narrador se limita a exponerlos, muy bien conectados para que la historia no se desvíe en ningún momento.

Toques de humor en frases como la que describe el gallo que le sale a la diva en medio de una representación, o los comentarios inocentes de las chicas del coro, hacen de una lectura agradable.

La novela (El fantasma de la ópera), no deja de ser una historia de amor entre un joven aristócrata, una cantante y un maestro de música (parece un trio, pero ahí está el misterio), manejando un misterio con maestría. La intriga, el misterio que rodean el palacio de la ópera con la aparición de un fantasma que va de boca en boca de todos los que trabajan en dicho establecimiento, una muerte, el robo de un caballo y el misterioso palco número 5 está narrado por boca de los protagonistas con la pluma magistral de Gaston Leroux.

Seguro estoy que muchos han visto una película o el musical y no han leído la novela, si eso ha ocurrido han cometido un pecado mortal por el que irán sin remedio al infierno, a ese donde el fantasma de la ópera os espera ¡Ja, ja, ja! (lease risa tétrica)

Aquellos que han leído la novela y no han visto una película o el musical, ¡mal también!, y aquellos que como yo han leído la novela y sólo han visto una película (la del cine dorado de Hollywood), sólo nos falta para alcanzar el cielo ver el musical.

Buena lectura.


domingo, 24 de enero de 2021

Frases



Todos hemos leído al menos un libro, es cierto que hay gente que se ha leído más de uno, pero esa no es la cuestión. La cuestión es que siempre hay una frase de ese libro leído, o del último, o quizás del que mas nos ha impresionado, que recordamos de tal forma que la asociamos al autor o al título y nunca se nos olvida.

Podría poner muchos ejemplos, alguno de ellos podría ser… « ¿Ha leído alguno de los libros que quema? », esta frase es muy singular y pertenece al libro Fahrenheit 451 de Ray Bradbury, o esta otra… « No son gigantes sino molinos de viento », de esta no hay duda pertenece a El ingenioso hidalgo de Don Quijote de la Mancha de Don Miguel de Cervantes. Otra podría ser… « Todas las personas mayores fueron al principio niños. (Aunque pocas de ellas lo recuerden) », pertenece a El Principito de Antoine de Saint Exupéry.

Seguro que todos los lectores de esta entrada recordaran frases que les impactaron por algún motivo por extraño que parezca, como que no tenía nada que ver con la trama, o no venía a cuento, o porque esta muy bien escrita. 

En mi caso hay una que recuerdo con especial atractivo, simplemente porque está dentro de una novela que se supone que es un drama. Esta novela es super conocida, seguro que hay multitud de gente que la conoce, unos porque la han leído, otros porque la han visto (se han hecho varias películas de ella), y otros porque la han disfrutado en un musical (que también se ha hecho y con mucho éxito). La frase la voy a compartir pero con una condición, y ella es  ¿A qué novela pertenece? Daré una pista: Su autor es francés, periodista, y nació en el siglo XIX ¡Vaya! He dado tres.

La frase es: « ¡Ah! ¡Un horrible, repugnante, plumoso, venenoso, espigado, espumeante y chillón gallo! ».

¿Podrías decir a qué novela pertenece? o ¿Su autor?

Bueno, visto los comentarios recibidos durante este año pasado en este blog es posible que nunca sepa si hay quien lo sabe, pero es igual, ahí lo dejo.

jueves, 7 de enero de 2021

El fantasma de Canterville


Hoy voy a volver con un fantasma, El fantasma de Canterville de Oscar Wilde.

Con esta novela el señor Wilde nos quiso hacer reír un rato, y digo un rato porque la novela es corta y se lee, pues eso, en un rato.

Vemos a un fantasma que por un motivo que no voy a desvelar tiene que espantar a todo aquel que entra en su castillo, y para ello cuenta con una serie de… disfraces, situaciones y acontecimientos que le salen bien hasta que se acomoda en el castillo una familia americana.

El señor Wilde ridiculiza a la forma de ser americana a través de la relación de esta familia con el fantasma. Un fantasma muy especial, todo hay que decirlo.

Seguro estoy que muchos habréis visto alguna de las miles de películas que se han hecho de esta novela, pero si no la habéis leído, comprobando la ironía de su autor hacia crítica del típico americano, y  de como un fantasma puede asustarse, no sabréis como se las gastaba Oscar Wilde cuando ironizaba.

Pasareis un buen rato con El fantasma de Canterville.


©Texto de Jesús García Lorenzo